domingo, 7 de febrero de 2016

Pico de las Nieves (1.949 m) Las Palmas de Gran Canaria

21/01/2016 Abandonamos Tenerife en ferry, camino de las Palmas de Gran Canaria y del Pico de la Nieves, con el Teide siempre presente en lontananza.


Al día siguiente recorrimos las Palmas en busca de información, ya que el Pico de las Nieves se encuentra en el centro de la isla y para llegar a él hay carretera desde los cuatro puntos cardinales hasta la base cimera, pero nos apetecía subir andando. Tanto en el punto de información turística municipal como en el del Cabildo no encontramos gran cosa. Tirando de un cutre mapa y algo de intuición decidimos ir en la gua gua 303, que sale cada media hora, desde la estación San Telmo hasta San Mateo; de ahí empalmar con la gua gua 305 hasta Cueva Grande y desde este pueblito ver cómo llegar o coger algún camino. Pero muchas veces no hay mejor informante que el autóctono local y, preguntando al conductor de la segunda gua gua, decidimos bajarnos en un paraje conocido como Cruz de Tejada, donde está el Parador Nacional. Al ser sábado había muchos canarios dispuestos a disfrutar del día claro y despejado que teníamos, así que concretamos una posible ruta hablando con otros andarines. También descubrimos que hay una red de senderos marcados por el Cabildo y, empalmando un par de ellos, podríamos llegar hasta el Pico de las Nieves andando.Comenzamos cogiendo el S-50 hacia Los Llanos de la Pez, tal y como nos habían aconsejado.


 El día es claro y el Teide sigue divisándose a lo largo del camino


Los viejecitos de la isla cuentan que para los guanches el Teide era su Dios y el Roque Nublo, que está tras de mí en la foto de abajo, era uno de sus guardianes. A sus pies hacían ofrendas de leche y manteca. También existe la creencia de que un día un terremoto derrumbará el Roque Nublo y que ese día se hundirán las islas Canarias bajo las aguas...


Al cabo de 4,5 kilómetros te cruzas con una pista ancha, que hay que coger a la derecha, hacia el campamento El Garañón,  ya que aquí la señalización es confusa. Pasado este campamento hay que seguir hasta encontrar la carretera y el Área Recreativa Llanos de la Pez. Seguiremos remontando por la carretera a lo largo de este Área hasta que nos encontremos, en la margen derecha, las flechas del sendero S-51 que te lleva hasta el Pico de las Nieves.



 El pico de las nieves se llama así porque debía ser el lugar donde mas nevaba de la isla y en el siglo XVII se construyeron a sus pies varios pozos de almacenamiento de nieve. Aunque parece mentira que en estas islas de eterna primavera podamos hablar de nevadas, hay constancia de las mismas en esta zona incluso en los meses de marzo o abril y algunos años en noviembre. En estos pozos podían llegar a almacenar 188 cargas de 160 libras cada una (73 kg) y durar almacenada en ellos hasta dos años. El traslado de la nieve al pueblo se hacía con caballos y se tardaba unas seis horas, por lo que una buena parte se derretía por el camino, aunque fuese tapada con paja y mantas.El sepulturero y perrero de la comarca era también el encargado de vender la nieve durante el verano. Principalmente la consumían las personas con más dinero como refresco, aunque también se usaba para bajar la fiebre o aliviar contusiones de familiares enfermos. El aprovisionamiento de nieve, más que un negocio, era un servicio del Cabildo al pueblo, ya que, como os podréis imaginar, la explotación de la nieve por estas tierras fue siempre deficitaria.


Detrás del vértice geodésico del pico está el Morro de la Agujereada, que al verlo nos parecía más alto. Quizá su complicado acceso para realizar mediciones sea el motivo por el que todavía no ha desbancado "oficialmente" al Pico de las Nieves. Pero ya el Cabildo de Canarias considera el Morro de la Agujereada como el auténtico techo insular con sus casi 1.956 metros. Aunque parece que tiene algo más (1.966) según el GPS de algunos escaladores que recientemente han subido. Ojo¡ hay que tener experiencia y material adecuado, ya que la subida tiene varias trepadas, no aptas para inexpertos y con un gran patio de caída y la bajada se hace rapelando....Así que, como comprenderéis, yo me conformo con en el pico de la Nieves, ya que pienso disfrutar de la vida unos cuantos años más...jajajajaja


Pero sea desde el Morrro de la Agujereada o desde el Pico de las Nieves se puede disfrutar de una amplia panorámica con los verdes pinares repoblados en los años 50, el roque nublo al fondo y el perfil del Teide en el horizonte lo que ha hecho que este territorio fuera declarado Reserva de la Biosfera en 2005.
La bajada la hicimos siguiendo un sendero bastante confuso hacia San Mateo de unos 10 km y una trepidante bajada.


Toda buena aventura ha de terminar con buena gastronomía, así que era de justicia invitar a una fresca cerveza acompañada de ricas papas arrugás y arepas a Jose, compañero de viaje, GPS viviente y fotógrafo oficial.


Así que...hasta la próxima...que volveremos a migrar a tierras andaluzas hacia finales de febrero